A continuación, vamos a intentar resumir los principales problemas o inconvenientes, que pueden aparecer cuando en la matriculación de un coche de importación.
Índice
Pago del ITP en compras entre particulares
El ITP es el Impuesto de Transmisión Patrimonial qué grava las transacciones que se realizan entre particulares. Si compramos un coche a un particular y nosotros somos particulares, al llegar a España tendremos que hacer frente al pago de este impuesto (denominado vulgarmente transferencia), y que va de un 4 % a un 8 % en función de cada CCAA
El tanto por ciento a pagar lo decide cada Comunidad Autónoma, sobre el importe más alto entre el que aparece en el listado de la Agencia Tributaria y el de compra.
Pago de ITP en compras a profesionales.
Cuando se compran vehículo a un profesional o compraventa, pero este no está dado de alta en el Registro de Operadores Intracomunitarios con un CIF a tal efecto, o tan solo nos emite un contrato de compra (y no emite factura), también tendremos que pagar el ITP mencionado en el punto anterior.
Compra como particular, pero quién firma el contrato es otra persona
Sí quién nos vende es un particular, y redactamos un contrato entre el comprador y el vendedor, quién tiene que aparecer como vendedor debe ser la misma persona que aparece como titular en la documentación del vehículo, y además tenemos que tener una copia de su DNI por las dos caras.
De lo contrario, la DGT no aceptará matricular ese vehículo, puesto que no podrá comprobar que realmente el titular de la documentación es quién ha vendido el coche .
Sí quién vende el vehículo es un profesional y emite factura legal, no es necesario que el coche está a su nombre.
Inexistencia de homologación.
Cuando el vehículo no tiene contraseña de homologación europea, y salvo en casos muy excepcionales de vehículos recientes que cumplan con normativa europea, no podremos matricularlo en Europa.
Compra con documentación incompleta.
Siempre que queramos matricular un coche de importación, tenemos que tener la documentación original completa, puesto que de lo contrario no podremos registrarlo en el país de destino.
Esos son algunos de los problemas más comunes, que pueden surgir en la matriculación de un coche comprado cuando de importación. Como siempre nuestro principal consejo es utilizar el sentido común y dejarse asesorar por profesionales.